n´| ciudad sensible

Ponencia | (-Re)generación urbana en código abierto | Jornadas “CIudad Sensible” | ETSAV Universidad Politécnica de Valencia. | Valencia | MAY14 |

El pasado 12 de Mayo, con la representación de Julia Font, Mayra Martínez, Fabio Silli y Rebeca López, participamos en la primera jornada de la segunda edición de Ciudad Sensible en la ETSAV, organizada por el colectivo Carpe Via, compartiendo el espacio #StreetViu con Hackity, y elCasc.

Objetivo de estas jornadas ha sido reflexionar entre todos sobre un modelo de ciudad en código abierto, capaz de promover nuevas dinámicas y formas de hackeo de los códigos urbanos tradicionales, para la construcción de una ciudad donde los ciudadanos vuelvan a ser protagonistas. Una ciudad donde el espacio público, a través de pequeñas acciones/intervenciones, recupere su identidad y su función de lugar de encuentro, generador de cultura y ciudadanía.

¿Qué es una ciudad adaptable?

Con esta pregunta Manu Fernández abrió la mañana debatiendo sobre las nuevas formas de transformación, uso y puesta en discusión de la ciudad actual, resultado de una gestión territorial y económica de tipo especulativo que, de una forma muy sutil, está llevando a una privatización del espacio público y consecuente reducción de los derechos de los ciudadanos a la ciudad.

¿Cómo y qué dinámicas de intervención se están activando en los espacios sub-utilizados para la reivindicación del derecho a la ciudad? ¿Cómo modificar el modelo tradicional de hacer urbanismo para que la ciudad sea más eficiente frente a las necesidades de sus habitantes?

A través de las tecnologías digitales y de las nuevas formas de comunicación se ha facilitado la critica ciudadana y su capacidad de intervención en muchos ámbitos. Pero, por otro lado, las formas de decisión política no se han adaptado suficientemente generando una tensión evidente entre las expectativas de una ciudadanía, que reclama más capacidad de intervención en la configuración de los espacios urbanos más cercanos, frente a una forma de hacer ciudad que aún no sabe como responder a una sociedad más abierta y colaborativa.

Si por un lado hay esta tensión reivindicativa de los ciudadanos para el espacio público, por otro lado, seguimos viendo como la crisis financiera sigue dejado un paisaje de desarrollos a medio urbanizar, solares que no se edificarán en años, locales comerciales y equipamientos abandonados, bienes patrimoniales en riesgo de derribo por estar en desuso. Por otro lado, sigue habiendo comunidades de ciudadanos que necesitan cada vez más de alguien con quién hablar, como nos han comentado nuestros amigos de Hackity presentando “The livingroom in your neighborhood” (El salón de tu barrio) o de El Fabricante de Espheras, presentando la segunda edición de elCasc, un Festival con el que se pretende reactivar el tejido urbano y social del centro histórico de Villena, estableciendo un pequeño campo de pruebas aplicado al estudio de los problemas y las potencialidades urbanas, sociales, culturales y tecnológicas.

En Ciudad Sensible hemos hablado de percepciones urbanas, encuentros ciudadanos en espacios reales y virtuales, de arquitectura con y sin arquitectos para los ciudadanos, tan lejos de la blanca pesadez de la Ciudad de la Ciencia que casi nos hemos olvidado que solo distaba unos pocos kilómetros de allí.

solar-corona-2

La segunda parte de nuestro relato sobre Valencia/Ciudad Sensible trata de aquellos espacios dónde la reivindicación protagoniza el espacio público: el Cabanyal y los espacios ciudadanos del Solar Corona y del Bosque Urbano El Carmen.

cabanyal-2      solar-corona-3

¿Qué tiene que ver el Barrio del Cabanyal con unos solares de Iniciativa Ciudadana?

Así de primeras parece que nada, pero al mirar con lupa emerge, entre otras cosas, el estado de reivindicación y precariedad en que versan estos espacios. El primero debido a los ataques contradictorios del planeamiento urbanístico local y autonómico, y el segundo por la naturaleza de los solares transformados en espacios públicos por ciudadanos.

En estos solares se han puesto en valor, y al alcance de todos, el patrimonio histórico y ambiental que todavía es posible detectar en el casco histórico de la ciudad.
Los solares de iniciativa ciudadana son resultado de un vacío urbano provocado por la burbuja inmobiliaria de estos últimos años. En el Solar Corona, el derribo del edificio existente, ha revelado las ruinas de una antigua casa dedicada a los tintes, de la que sólo quedan las cimentaciones y la vegetación vinculada al antiguo cauce del río Turia y a los intramuros árabes del casco histórico. Si para el espacio autogestionado del Solar Corona los ciudadanos han conseguido un convenio con el propietario y la administración, para que no se desaloje hasta su futura construcción, en el caso del Bosque Urbano, lo que se está intentando es su reconocimiento como valor para la ciudad, porque el casco histórico carece de áreas verdes de tal calidad.

solar-corona-4      bosqueurbanocarmen

Mientras que el Cabanyal, antiguo barrio de pescadores y marineros, a principio del 1900, con su incorporación a Valencia, se transformó en centro de ocio y restauración de la clase burguesa. Por su valor histórico y cultural fue declarado BIC en 1993, debido a “su peculiar trama en retícula derivada de las alineaciones de las antiguas barracas, en las que se desarrolla una arquitectura popular de clara raigambre eclecticista” (Decreto 57/1993, de 3 de mayo, del Gobierno Valenciano, por el que se declara Bien de Interés Cultural el conjunto histórico de Valencia).

cabanyal-1      cabanyal

Este barrio hoy se ve afectado por la entrada en vigor del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI), que comporta el derribo de 1651 viviendas. El PEPRI pretende la prolongación de la Avenida Blasco Ibáñez sobre la trama protegida del Cabanyal, como elemento central de un plan de rehabilitación urbana en una ciudad en la que sigue en vigor un Plan General (PGOU) del 1988.

En el PEPRI se propone el cumplimiento de una planificación de finales de siglo XIX: el antiguo Paseo al Mar. Esta avenida era elemento estructurante de la planificación de la franja de cuatro kilómetros entre Valencia y la costa, que se iba planificando según el modelo de ciudad jardín y que se interrumpía al llegar al Cabanyal. Con este Paseo se quería acercar el mar a la burguesía valenciana, conectando los Jardines del Real a la playa.

prolongacion

Desde 1997 y a partir del 1998, cuando se hace efectivo el PEPRI, el Cabanyal empieza realmente a peligrar porque replantea como necesaria la prolongación de la Avenida Blasco Ibañez frente al valor histórico-cultural del barrio. De hecho, en el preámbulo de la Ley 2/2010 – que amparó los derribos fraudulentos de ese mismo año – se dicta con tremenda suficiencia: “Y, desde luego, la peculiar trama en retícula derivada de las alineaciones de las antiguas barracas que presenta el barrio del Cabanyal y la arquitectura de raigambre eclecticista del mismo no son valores lo suficientemente trascendentes como para prevalecer, de un modo absoluto, sobre actuaciones urbanísticas que producen una mejora de la relación del barrio del Cabanyal con su entorno territorial o urbano.”

Es decir, que a pesar del tesoro urbanístico que pueda existir en el Cabanyal, éste puede ser derribado si se interpone en la creación de una avenida (o autopista, o aeropuerto, cualquier cosa cabe en esa interpretación). Afortunadamente, el PEPRI actualmente se encuentra paralizado judicialmente.

pepriactuacion_bn

Estas realidades, a pesar de su precariedad y dificultades, siguen siendo llevadas al cabo por ciudadanos que revindican estos espacios como lugares identitarios de un barrio o de una ciudad que, como muchas otras, está dispuesta a vender su patrimonio para obtener beneficios económicos resultado de la especulación en haz de seguir construyendo obra nueva de dudosa calidad, frente al mantenimiento de un patrimonio histórico-arquitectónico propio. La Plataforma “Salvem el Cabanyal” sigue oponiéndose a las injerencias de los medios de comunicación y de las políticas que intentan remarcar el estado de precariedad e inseguridad del barrio, para justificar su desmantelamiento. Pero por otro lado, algunos de los ciudadanos con los que hemos hablado, nos han manifestado sus temores sobre las dificultades en la gestión del día a día de los solares que, tras la fase explosiva de arranque, ahora necesitan arraigar en el barrio.

En estos casos concretos, al tratarse de iniciativas ciudadanas autogestionadas, se necesitan cuidado e implicación constante para que la programación de las actividades propuestas no sea solo eventual o relativa a los fines de semana, sino que se pueda llevar al cabo todos los días. Se trata de un trabajo duro que necesita mucha dedicación, porque mantener y mejorar la calidad de vida en el Cabanyal, salvaguardando su edificado y su trama histórica o hacer que las pequeñas intervenciones ciudadanas en la ciudad sigan activas, significa que otro modelo de gestión, realmente centrado en el interés de toda una comunidad, y no en los intereses económicos de pocos, es posible.

Referencias:

Plan Cabanyal-Canyamelar
http://www.plancabanyal.es/

Plataforma “Salvem el Cabanyal”
http://www.cabanyal.com/nou/?lang=es
http://www.cabanyal.com/nou/el-pepri-un-pla-de-reforma-interior-sense-proteccio/?lang=es

PEPRI ( memoria justificativa 04/2010)
http://www.cabanyal.com/nou/wp-content/uploads/2010/04/PECABMEM2001.pdf

Solar Corona
http://solarcorona.wordpress.com
https://www.facebook.com/elsolarcorona?ref=ts&fref=ts
http://torresastaburuaga.com/

Bosque Urbano en el Carmen

http://torresastaburuaga.com/
https://www.facebook.com/BosqueUrbanoElCarmen?ref=ts&fref=ts
http://wudstudio.com/
http://laminusculaestudio.com/2013/10/13/propuesta-de-bosque-urbano-en-el-carmen_valencia-2013_-urban-forest-proposal-in-el-carmen/

Volver a la página de inicio

Publica un comentario